La biblioteca recibe una distinción por su proyecto “ cuentos como espejos”

Este año gracias al cuento “Clara y su sombra” se ha tratado el abuso sexual a menores y anteriormente con “ El túnel y yo” los miedos

La biblioteca municipal de Ermua ha sido distinguida con el sello del Consejo de Cooperación Bibliotecaria de 2017, en su primera edición, por su programa “cuentos como espejos”. Se trata de una distinción entre las bibliotecas públicas de todo el Estado.
El consejo ha valorado como innovador un proyecto local que a través de la animación lectora y del cuento aborda temáticas difíciles como, en este caso, los abusos sexuales en la infancia.
Es un reconocimiento de carácter honorífico y no conlleva dotación económica ninguna. La biblioteca recibirá, en el próximo pleno del consejo, previsto para el día 20 de febrero en Valencia, un diploma del Consejo de Coordinación Bibliotecaria y en un sello del CCB que acredita el reconocimiento (digital) para utilizarlo en imagen corporativa de sus canales digitales. El reconocimiento lo recogerán representantes del departamento de Cultura y del servicio de la biblioteca.
“Cuentos como espejos” es una propuesta para abordar temáticas difíciles desde la animación lectora y el cuento. Es uno de los programas que se ofreció en 2017 a los centros educativos locales.
Dicho programa tiene como objetivo dar a conocer un cuento que, además de valor literario, sirve para abordar un tema o temas que a las personas adultas nos resultan incómodos, perturbadores o son considerados tabú en la sociedad. La actividad se plantea mediante una exposición en la que se disfruta del cuento de una forma activa, con una actividad posterior que permite hablar y debatir sobre lo narrado.
Las actividades parten de una exposición basada en el libro “Clara y su sombra” de Elisenda Pascual (Uranito, 2016), que desde el 27 de marzo y hasta final de año ha recorrido varios centros escolares de Primaria de Ermua.
“Clara y su sombra” pretende mostrar en forma de cuento la realidad que viven tantos niños y niñas actualmente. El tema del abuso sexual infantil es a menudo relegado al ámbito de los profesionales de la salud y judicial. Hablar de ello resulta incómodo y difícil en una sociedad que tiende a esconder aquello que le molesta. Este proyecto pretende visibilizar esta temática, dando a conocer que existen situaciones que no son sanas ni respetuosas, que deben identificarse y nombrarse para poder pararlas.
En la actividad participaron 727 escolares y 51 profesores.
La exposición es obra de la ilustradora del cuento, Mercé Serra Valls y cuando llegaba a cada centro escolar se ofrecía una sesión formativa, de Garaitza, al profesorado para que luego, de forma autónoma pudieran trabajarlo y acercárselo a su alumnado. Se mostraba al profesorado cómo realizar la visita a la exposición, para pasar después a una tertulia. Además, se les ofrecía la unidad pedagógica elaborada por la propia autora del cuento.
Por otra parte,  la biblioteca ha elaborado una guía de cuentos, películas y recursos para la prevención del abuso sexual infantil que se distribuye en los centros escolares y la biblioteca.
El proyecto “Cuentos como espejos” es una continuidad del de “El túnel: tú y yo” que se desarrolló con anterioridad. En la actividad participaron 727 jóvenes y 51 profesionales de la enseñanza. Entonces se abordaron los miedos, los roles de género o las relaciones entre hermanos.

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